miércoles, 13 de febrero de 2008

Crear problemas y ofrecer soluciones.


El gran sociólogo y analista de la comunicación global Armand Matterlat junto con Ariel Dorfman en su libro “Para leer al Pato Donald”, nos introduce en las sutiles y más que persuasivas técnicas de manipulación mediática y cultural. El profesor Noam Chomsky lo expresa en estos términos: La manipulación y la utilización partidista de la información condicionan de tal forma a la opinión pública que anulan la capacidad del ciudadano para decidir libre y responsablemente. Y quien domina la información, domina en cierta forma la cultura, la ideología y, por tanto, controla también en gran medida a la sociedad”.
Métodos convencionales de control y planificación de las corrientes de opinión como:

Crear problemas y ofrecer soluciones.
Por ejemplo: dejar que se desarrolle o intensifique la violencia urbana, u organizar atentados sangrientos, a fin de que la opinión pública sea la demandante de leyes de seguridad que en la práctica, limiten la libertad, o justifiquen acciones militares. Recordemos los atentados del 11 S en EE.UU. y la aprobación de la Ley Patriótica, aún en vigor.
Utilizar el aspecto emocional y no la reflexión.
La instrumentalización sistemática de conceptos como Patria, Nación, respeto a Dios etc. son garantías sobradamente contrastadas de manipulación; Adolf Hitler decía: “Una información, aunque sea falsa, repetida hasta la saciedad, posibilita hacer creer a la gente que el cielo es el infierno y el infierno el cielo... Cuanto más grande sea la mentira, más la creen (...) Me valgo de la emoción o sentimientos para la mayoría y reservo la razón para la minoría”.
Como muy bien dice M. Panyella
"La apelación a elevados sentimientos en relación con la patria, la nación o la religión utilizando argumentos incendiarios es aplaudida y calificada de "brillante discurso" o de "poner las cosas acertadamente en su sitio". Así pues, lo que a nivel individual sería un claro candidato a recibir unas sesiones de psicoterapia resulta que a nivel colectivo es un ejercicio de dignidad y coherencia política. Lo que sería una mentira, una incitación al odio, a la agresión y una perversidad se convierte en patriotismo y valentía. Son más que mentiras, es pornografia emocional. Ciertos líderes, sean religiosos, políticos o mediáticos, y la pornografía emocional que practican sólo nos conducen a la confrontación colectiva, al antidiálogo, al desastre democrático".
Otros métodos, como el overbooking o “gran bouffe” informativa o efecto contrario de “desinformación” adaptados a las nuevas realidades geo-políticas están demostrando tener un grado de eficacia enorme.

El objetivo último es mantener a la opinión pública bajo control, creando los estereotipos de opinión adecuados a tal fin.


El que fuera director de la Coca Cola, David Wheldon, expresaba así su estrategia publicitaria: “Ante la dificultad de prever como será el consumidor del futuro, la solución es crearlo nosotros mismos desde el presente con la ayuda de buenas ideas y buena publicidad. El consumidor del futuro va a estar donde queramos que esté”. Lo cierto es que no hay equipo de expertos capaces de rivalizar con los que emplean las grandes compañías multinacionales.
Un mundo feliz”, de Aldoux Husley, imaginaba lo que sería una sociedad perfecta: una autocracia con apariencias de democracia, con individuos genéticamente condicionados; un sistema de esclavitud basado en el consumo y la diversión, donde los individuos amaran su propia servidumbre más que a su vida, donde ese amor llevara por nombre “libertad”.

Ante estas políticas de manipulación y control desarrolladas por los grupos de poder tanto económicos como políticos, uno de los mayores retos que se nos plantea es que se pone a prueba nuestra capacidad en filtrar, objetivizar y contextualizar toda esta información. Las estrategias y técnicas para crear corrientes de opinión se han adaptado perfectamente a esta nueva realidad y cada vez es más difícil sustraerse a los efectos absolutamente perniciosos de estas estrategias.
Por todo ello y en la medida que deseemos tener un conocimiento minimamente objetivo y global de nuestro entorno, considero imprescindible disponer del mayor número de fuentes contrastadas de la información, para así, tener elementos suficientes y poder opinar con un mínimo de objetividad de qué, quien y porqué se nos da esa información y conocimiento.
El tratamiento y uso que hacemos de los medios de comunicación determina el grado de compromiso que tenemos ante y con la sociedad. Hecho que, en demasiadas ocasiones, es el efecto de “ambivalencia o cultura de la defección” el que prevalece por encima del deseo de buscar seriamente “la verdad” contrastada o, dicho de otra forma, la contextualización política de la noticia o información. El protagonismo de los estereotipos culturales es el principal obstáculo, tanto para evitar que nos manipulen como en conformarnos con encontrar “nuestra” verdad corporativa.
La realidad es en este caso más que clarificadora dado que lo que más se demanda en nuestra sociedad es un servicio a la carta, tanto de la propia información como de la interpretación en clave política y de opinión de la misma, independientemente que la noticia sea veraz o no; “ oímos y vemos lo que nos interesa oír y ver”.

Por último, pienso que, si realmente queremos ser conscientes del alcance y consecuencias de la Información y de las políticas “desinformativas “, es imprescindible desarrollar proyectos pedagógicos que nos capaciten para, desde una perspectiva de racionalidad critica, entender tanto el alcance de la noticia como lo más importante, de acuerdo con la fuente, la opinión que tengamos de ella. Nuestro compromiso con un proyecto de Globalización sostenible y conseguir de forma inequívoca que sea un vehículo de integración multicultural y Aldea común para todos los pueblos será la mejor garantía de que un mundo mejor es posible.

1 comentario:

carlos dijo...

EXCELENTE, BASTA VER COMO SEGUIMOS VOTANDO A LOS MISMOS DELINCUENTES DE SIEMPRE, O COMO MILES DE CHICAS Y CHICOS SE DESPRECIAN O APRUEBAN DE ACUERDO A LAS MARCAS QUE VISTEN Y, LLEGAN HASTA LA MISMA ENFERMEDAD PARA PODER USAR LOS MODELOS QUE ESAS MARCAS PROPONEN.
NUESTRA PERSONALIDAD, ESTA JAQUEADA POR LA MAQUINARIA MASIFICADORA POLITICO-PUBLICITARIA.
A TODO NIVEL, EN TODOS LOS ORDENES, HASTA EN LOS DEPORTES, FOMENTANDO VIOLENCIA PARA QUE PREFIERAS QUEDARTE EN CASA Y PUEDAN VENDERTE LOS ENCUENTROS CODIFICADOS¡¡
NADA ESCAPA, TRATEMOS DE ESCAPAR¡¡